Reducir la desigualdad en los países y entre ellos
Este objetivo intenta reducir las diferencias de ingresos y de oportunidades entre los países y dentro de ellos, reducir la pobreza en las zonas más desfavorecidas, promover la inclusión social, económica y política para todos/as, promover políticas a escala internacional para mejorar la regulación y el control de los mercados y de la instituciones financieras y facilitar la mitigación y la movilidad segura y responsable de las personas migrantes. “Nadie debería quedarse atrás” debe ser más que un simple eslogan en los medios sociales. No dejar a nadie atrás significa educación, salud y bienestar e igualdad de oportunidades para todas las personas.
Las empresas deberían ofrecer condiciones de trabajo decentes para todo su personal, especialmente para las personas menos favorecidas. Para ello, se pueden redistribuir los salarios de una forma más justa y equitativa y aplicar mecanismos eficaces para luchar contra la evasión fiscal.
A fin de educar al alumnado sobre los problemas de la desigualdad, las persona docentes deben mejorar sus propios conocimientos sobre las diferentes dimensiones de la desigualdad en la vida diaria en distintas partes del mundo. Es también necesario aumentar la concienciación sobre las desigualdades para hacer que el alumnado empatice con las personas en situación de discriminación. El objetivo en materia de educación es que se les permita adquirir la habilidad de evaluar las desigualdades, de reconocer sus causas y de entender los pasos que debemos llevar a cabo para reducirlas.